Por Efraín Freyre, Médico Psicoterapeuta del Centro Psicológico Atulado –Puedes contactarme en www.atulado.pe, informes@atulado.pe y/o al cel: 947613543.
Tengo una enfermedad y no sé qué es, solo sé que tengo dolor, un dolor en todo el cuerpo y que no soporto, no sé si es el músculo, el tendón, o si son las articulaciones, solo sé que no lo soporto ni un día más, ya ni la ropa la tolero, no puedo dormir con mi esposo, porque al más mínimo contacto, me siento fatal, y eso me preocupa, pero no puedo, me siento mal, lloro mucho, pero y es que cuando me abraza me duele, ya ni puedo cargar cosas, es un martirio, y me siento mal, pero ¿qué hago?, si no lo puedo controlar, además de eso, que ya es bastante, tengo mucho cansancio, cualquier cosa que haga, que antes solía hacer, me cansa más de lo normal, ya no soy la misma, y eso me frustra tanto, me pone de mal humor, estoy irritable todo el tiempo, y lo peor, es que me he dado cuenta, que cada vez que tengo alguno de estos cambios de ánimo, o preocupación, o discuto con mi esposo e hijos, el dolor aumenta. Y la verdad sólo quiero que pase rápido el tiempo, y que se acabe el día para que sea la hora de dormir, para que este martirio acabe ya, pero llega la noche y resulta que ahora me cuesta también dormir, ya no sé qué hacer, estoy desesperada.
Y no crean que no he ido con especialistas para que me revisen, primero fui al neurólogo y luego al gastroenterólogo, ah y ¿por qué al gastro?, porque encima de todo ahora tengo problemas de estreñimiento, y cada vez que como se me hincha la barriga, cosa que antes no tenía, fui también al traumatólogo y luego al psiquiatra, este último me dio básicamente pastillas para el ánimo y para dormir, que bueno ahora al menos descanso un poco más, porque ya levantarme para ir a trabajar era un martirio, pero la verdad nadie ha sabido decirme algo muy claro, creo q cada uno ha visto mis síntomas en función a su especialidad y me han llenado de pastillas, bueno ayer fui con otro especialista recomendado, el reumatólogo, y después de escuchar mis síntomas, me habló de una enfermedad, llamada ¡fibromialgia!. ¿Fibromialgia doctor? Le pregunté, y en ese momento pasaron muchas cosas por mi cabeza, el doctor me calmó y me dijo que haría una prueba de 18 puntos de dolor, me explicó también que no tenía que cumplir los 18 puntos, que con 11 puntos ya era más que suficiente para que existiera la enfermedad, entonces procedió a revisarme, y ¿qué creen?, tenía yo 14 puntos de dolor, ahora si parecía que tenía un diagnostico real, me explicó que la fibromialgia es una enfermedad estrechamente relacionada con trastornos psicológicos, pero con esta definición me asuste aún más, acaso, ¿estoy loca? me pregunté, me dijo que el causante o detonante de esta tal fibromialgia, que hasta el nombre asusta, es muy frecuente en personas que sufren de ansiedad y depresión y que esto hace que el dolor se agrave y sea crónico, entonces ahora entiendo, porque cada vez que mi estado de ánimo variaba para mal yo sentía más dolor, por ello me recomendó llevar un tratamiento médico y psicológico, ya que me explicó que la fibromialgia, es una enfermedad con un fondo netamente emocional.
A decir verdad, salí más tranquila y pensando en la explicación emocional que me dio el doctor, y tiene sentido, en estos últimos tres años, mi vida ha tenido muchos cambios, con el tiempo he ido acumulando mucha carga emocional de culpa, de estrés, los reclamos de mi esposo por el tiempo, para con la familia, estaba siempre cansada, y claro ahora me doy cuenta que todo terminó mal, no hay cuerpo que aguante tanta carga.
Ahora estoy recibiendo un tratamiento Médico con terapia natural a base de colágeno hidrolizado, Psicológico y de forma grupal con personas similares a mí y Emocional con talleres de Hatha Yoga y Meditación especializado en el dolor crónico y todo de manera integral y la verdad me han ayudado mucho las terapias grupales, a sentirme comprendida, a explayarme, a decir lo que siento, sobre todo, encontrar un espacio para mí, en el cual siento mucho apoyo y recibo una guía para manejar las situaciones difíciles, esto lo complementamos en el programa con yoga, comencé a ver resultados en poco tiempo, el dolor ha disminuido bastante, estoy más animada para hacer mis cosas, he logrado dormir mucho mejor, mi cansancio también ha disminuido, ahora me siento mucho más tranquila, tengo el control de mis emociones y por ende de este dolor que antes no me dejaba vivir en paz y estoy en mi segundo mes de mis sesiones y continúo para que quede totalmente curada.